La principal función es que los nutrientes de la comida puedan ir a la sangre y luego a todas las células del cuerpo para que puedan transformar los nutrientes sanguíneos en energía. También tiene la misión de rechazar a los microorganismos externos que puedan causar enfermedades como virus o bacterias.
Las principales partes del aparato digestivo son:
- Boca: encargada de triturar los alimentos y en ella comienza el proceso de digestión con la saliva
- Faringe: tubo que une la boca y el esófago.
- Esófago: tubo que une la faringe con el estómago.
- Estómago: ensanchamiento con forma de saco donde los distintos ácidos digieren el bolo alimenticio. Sus paredes tienen una fuerte musculatura y está formada por repliegues
- Hígado: es una glándula digestiva de gran tamaño. Interviene en el metabolismo de los alimentos, fabrica bilis y almacena nutrientes.
- Páncreas: se encuentra detrás del estómago. Genera ácidos para digerir los alimentos y controla los niveles de glucosa de nuestro cuerpo.
- Intestino delgado: es un tubo largo, entre 3 y 5 metros. En él se realiza la mayor parte de la digestión y se absorben los nutrientes y el agua
- Intestino grueso: es tubo más ancho y corto, de 1,5 metros. Los nutrientes que no necesita nuestro cuerpo, se almacenan aquí y los convierte en heces.
- Recto: es una bolsa donde se almacenan las heces.
- Ano: por donde se expulsan las heces.
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